Tras el acuerdo alcanzado entre UTECA (televisiones privadas) y el Gobierno hecho público en la última hora de ayer, España podrá emplear las frecuencias de la banda de los 800 MHz para servicios de telecomunicaciones a partir del 1 de enero de 2014, adelantando así en un año la fecha prevista por el anterior ejecutivo.
Para ello, será necesario reubicar las señales de TDT que actualmente hacen uso de esa banda del espectro, mayoritariamente ocupado por canales de televisión privada de ámbito nacional, así como por algunas televisiones autonómicas o TVE en ciertas regiones. Todas estas señales deberán desplazarse a otras frecuencias diferentes, lo que requerirá en los casos de edificios no unifamiliares y con equipos monocanales, que se realice una adaptación en la antena colectiva para permitir recibir las señales en sus nuevas frecuencias.
El Gobierno ya anunció el pasado mes de junio que se podrán solicitar ayudas al Gobierno para la realización de tales adecuaciones técnicas. La solicitud de subvenciones se podrá realizar a través de la empresa instaladora que se encargue de adaptar las instalaciones de los edificios, actuarán de intermediarios con la Administración, de acuerdo al plan del Gobierno. Podrán solicitar una subvención para resintonizar la antena las "comunidades de propietarios de un edificio o conjunto de edificios sujeto al régimen de propiedad horizontal" o "propietarios de una infraestructura común de recepción de televisión digital".
Dado que el Gobierno se encuentra reduciendo el déficit de las cuentas económicas del Estado, ha intentado reducir todos los costes posibles en este proceso (tanto los destinados a promoción como a subvenciones de adaptación de antenas), de ahí que haya propuesto a los operadores diferentes planes de actuación que finalmente ha desembocado en la eliminación de uno de los seis canales múltiples previstos para las emisiones de los canales privados de ámbito nacional, manteniendo
los otros restantes cinco que serán capaces gracias a nuevas técnicas
de compresión de albergar los mismos canales que estaban previstos
emitir a través de los seis canales múltiples.
De esta forma, los 24 canales privados podrán seguir emitiendo sin necesidad de fusionarse o eliminarse, permitiendo así a los operadores mantener su estrategia comercial y el desarrollo previsto del sector audiovisual. Algunas propuestas del Gobierno ponían encima de la mesa la reducción a la mitad de los canales privados, a lo que los operadores nacionales se opusieron frontalmente, calificándolo además de "expropiación".
Este plan también pretende impulsar la televisión conectada, permitiendo así que ésta se convierta en una televisión interactiva con posibilidades de ver programación a la carta a través de internet. También se establecerán compromisos para potenciar la alta definición,
que en la actualidad ya cuenta con cinco canales nacionales (TVE HD -en
pruebas-, Antena 3, Cuatro, Telecinco y La Sexta) y diversas
televisiones autonómicas (Aragón TV, TV3 -Cataluña-, Canal 9 -Com.
Valenciana-, 7RM -Murcia-, TPA -Asturias-, Telemadrid, Canal Sur -Andalucía-, IB3 -Islas Baleares-, TV Canaria y Castilla-La Mancha TV).
Con el plan hoy aprobado, podrá instaurarse en España la tecnología 4G desde enero de 2014. La tecnología 4G implica unos beneficios económicos para Europa estimados en 150.000 millones de euros y, además, el despliegue de redes de comunicaciones móviles, que tendrán que absorber el elevado volumen de tráfico de internet móvil que se va a generar.
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